
Piedad Sánchez: el alma detrás del restaurante en Talavera de la Reina
En cada plato que sale de nuestra cocina hay una historia. Una historia de esfuerzo, de pasión, de raíces y de mucha, mucha verdad. Esa historia tiene nombre propio: Piedad Sánchez, la mujer que está detrás del alma de Zinco Zentido, nuestro restaurante en Talavera de la Reina.
Hoy queremos contarte quién es, de dónde viene y por qué cada receta que prueba un comensal es mucho más que comida: es emoción servida en plato.
De Málaga a Talavera: una vida cocinada a fuego lento
Piedad llegó a Talavera de la Reina desde Málaga con tan solo 24 años. Su acento andaluz, su energía incansable y su amor por el trabajo la llevaron a ocupar muchos puestos a la vez: camarera en cafeterías, extra en restaurantes, ayudante en caterings… siempre con una sonrisa y con una voluntad férrea.
Pero un día, las vueltas del destino —y la necesidad— la llevaron a dar un paso decisivo: dejar la sala y meterse en cocina. En uno de los restaurantes donde trabajaba, se necesitaba urgentemente un cocinero. Y ella, sin formación profesional en aquel momento, pero con una memoria gastronómica heredada de su madre, dijo “yo lo hago”.
El talento que se cocina desde la infancia
Piedad no tenía títulos, pero sí un talento natural. Uno que se había ido forjando en los fogones de su casa, observando a su madre, aprendiendo con los cinco sentidos. Con esa base, y una memoria privilegiada para los sabores, se ganó a los clientes. Tanto, que decidió dar el siguiente paso: formarse.
Lo hizo en la Escuela de Hostelería de Toledo, donde conoció a su maestro Miguel Arce. Su talento se transformó en habilidad profesional. Y su vocación se convirtió en pasión gastronómica.
Ni siquiera el embarazo detuvo sus ganas de aprender: terminó su primera formación a punto de dar a luz. Después vinieron cursos de sumillería, pastelería, cocina avanzada, corte de jamón, dirección de cocina… y nunca dejó de trabajar mientras estudiaba. Eso es vocación.
El camino no fue fácil, pero sí lleno de sentido
Entre fogones, servicios y formaciones, llegaron oportunidades como trabajar junto a chefs como Iván Cerdeño o Pepe Rodríguez. Pero también llegaron obstáculos: un accidente, un incendio, una enfermedad, e incluso la idea de volver a Málaga.
Pero Piedad no se rindió. Porque para ella la cocina no es un trabajo, es su forma de estar en el mundo.
Gracias al apoyo incondicional de su familia y su marido, y a su fuerza interior, hoy lidera un restaurante en Talavera de la Reina que lleva su esencia en cada rincón: Zinco Zentido.
Zinco Zentido: más que un restaurante, un proyecto de vida
Piedad no solo ha creado un menú. Ha creado un lugar donde se cocina con todos los sentidos. Donde los manteles están cosidos a mano por ella misma. Donde ha picado, pintado, restaurado muebles… todo con sus propias manos.
Zinco Zentido es un homenaje a sus raíces, a su madre, a su tierra y a su nueva casa: Talavera.
Es un espacio donde cada detalle está cuidado con mimo. Donde el trato al cliente es tan cálido como el pan recién horneado. Y donde la cocina es honesta, sabrosa y emocional.
Una historia que inspira, una cocina que emociona
En un mundo donde la cocina a veces se convierte en espectáculo, Piedad ha optado por lo auténtico. Por la tradición, por el sabor de siempre, por el cariño en cada preparación.
Quien prueba su cocina lo nota. Porque más allá de las técnicas y los ingredientes, está la historia de una mujer que nunca dejó de luchar por su sueño: tener su propio restaurante en Talavera de la Reina.
¿La conoces ya?
Si aún no conoces a Piedad ni has probado su cocina, este es el momento.
Te invitamos a venir a Zinco Zentido, a sentarte en nuestra mesa y a descubrir que la cocina hecha con alma, se nota desde el primer bocado.
Y tú, ¿también crees que la cocina con historia sabe mejor?
Cuéntanoslo en comentarios… ¡o ven y descúbrelo por ti mismo!